viernes, 9 de septiembre de 2011

Una culpable potencial

En la entrada anterior he enumerado tres puntos en los que yo misma no he cambiado. Sin embargo, he recordado que tenía uno más. Es sobre mi "hermosura". O sea, sigo siendo "guapa" en este país tanto como sigue sin gustarme cocinar.

Pero quizás estoy equivocada. Tal vez haya algún cambio. Es que, en los últimos cuatro meses, ha aumentado la frecuencia en que me dicen la palabra "¡guapa!" por todas partes. Es un cambio notable. Es que, cada vez que salgo de casa y ando por la calle, no hay ningún día que no escuche la expresión de admiración "¡guapa!". Es bastante sorprendente.

Por supuesto que he reconocido bien mi "belleza" en este país, además, estoy muy acostumbrada a que los hombres de este país no puedan menos que admirar mi "hermosura" con la palabra "¡guapa!", así que no siento algo especial. Es que no hay nada que hacer porque pensaba que mi "belleza" no se podía cambiar. Pero creo que mi "belleza" va cambiando, o sea, voy siendo más "guapa" sin querer. Seguro que es así, es que, si no, no se puede explicar el aumento del halago "¡guapa!".

Últimamente, hay muchas ocasiones en las que me he encontrado con los hombres más insistentes. Por ejemplo, había un chico que me paró para preguntarme obstinadamente el número de móvil. O bien, había un caballero que se acercó a mí muy sonriente y me dijo: "Perdona, pero no puedo evitar decirte que eres muy, pero que muy bella. ¡Qué guapa eres! ¿De dónde eres?" Sí, una mujer "guapa" no puede llevar una vida tranquila.

Bueno, el hecho es que tengo una realidad de la que me he dado cuenta y que me preocupa mucho. Parece que mi "belleza" es muy llamativa no sólo para los peatones, sino para los conductores de coche. En realidad, hay muchos conductores que fijan la mirada en mí manejando el coche cuando pasan por mi frente. Es que se encuentran nuestras miradas, sobre todo, cuando estoy esperando el autobús o el semáforo en la calle. Sabéis, ellos fijan la mirada en mí durante uno o dos segundos, pero el coche se está moviendo. O sea, ellos están conduciendo sin prestar atención adelante durante dos segundos. ¿No creéis que es suficiente tiempo en el que puede provocarse un accidente?

Me preocupa mucho que, si no se parara la evolución de mi "belleza", algún día, ocurrirían muchos accidentes de tráfico por la causa de mi "hermosura". Afortunadamente, hasta hoy, no ha ocurrido ninguna desgracia. Pero no puedo quitarme el cargo de conciencia de que seré una culpable potencial.

Por favor, aunque soy tan "guapa" que os cautivo, conducid con mucha atención y con mucha concentración.

Por cierto, yo, que tengo tanta "hermosura" como para causar un escándalo en la calle, no puedo parar de preocuparme. Si yo, que soy muy "guapa" en este país, trabajara en una oficina, los compañeros masculinos no podrían concentrarse nada en sus trabajos. Bueno, no sabía que tengo que sentirme tan culpable sólo por ser "guapa".

El almuerzo de hoy 9 de septiembre de 2011:
Paella valenciana precocinada.
Pimiento asado.
Yogur.
Calentada dos minutos en el microondas por Macarena.

2 comentarios:

  1. Hola, buenas noches!!

    Yo soy muy feo, bueno vamos a dejarlo en feo. Y leyendo tu entrada de hoy me quedo muy tranquilo. No me asaltan por la calle y no tengo preocupación o ansiedad por producir "catástrofes", jejejejeje. Entiendo que te sientas muy abrumada por se "guapa" (la belleza oriental, ..........), pero de ningún modo te puedes sentir culpable.
    Estoy de acuerdo contigo, si trabajarás en una oficina la empresa quebraría, porque tus compañeros no te quitarían ojo,jejejeje. Huummmmmmmm, ¿y si fueran compañeras....?.
    Siento lo de tu Nadal, pero no se puede rendir. Que siga el ejemplo de Federer.
    Áaaaaaaaaaaaaanimos , Macarena.

    Gracias por leerme.
    Buenas noches!!

    ResponderEliminar
  2. No tenemos pruebas de lo que dices.

    ResponderEliminar