jueves, 2 de septiembre de 2010

Al comienzo de septiembre

Ha empezado el mes de septiembre y siento que ya se han acabado totalmente mis vacaciones de 2010.

No sé por qué, pero creo que como soy japonesa y estaba acostumbrada al ritmo anual japonés, cuando empieza el mes de enero, el mes de abril y el mes de septiembre, mi mentalidad se renueva. Estos tres momentos del año me hacen sentir renovada y eso me gusta mucho.

Cuando era alumna en el colegio, el día uno de septiembre no era un día alegre. Ese día era el primer día del segundo trimestre, o sea, la vida me cambiaba y era totalmente diferente a la de ayer. Como las vacaciones de verano se acababan y volvía a ir al colegio, se me hacía un día bastante pesado. Además, normalmente, el día treinta y uno de agosto, me apremiaban los deberes de las vacaciones. Así que al día siguiente estaba muy cansada.

Pero ya soy mayor y no tengo algunos deberes en verano, el principio de septiembre es sólo el comienzo de una nueva estación. Menos mal que ya soy adulta.

No sé si en este mes los españoles sienten o no algo como nosotros, más bien, como yo. Pero imagino que algo sentirán, es que el año pasado asistí a un curso anual, y había muchos compañeros españoles durante el mes de septiembre. Así que los españoles también tendrían ganas de empezar algo en este mes, aunque antes de llegar el mes de diciembre, la mayor parte de los compañeros desaparecieron. Al final del curso, habíamos menos de un tercio de los alumnos que había al inicio de las clases.

Ayer me di cuenta de que he crecido durante las vacaciones en Japón. Parece que el tamaño de mi cuerpo se ha hecho más grande, no sólo la parte llamativa, sino todo lo demás. Ummmmm... Tengo que realizar mucho ejercicio desde hoy.



El almuerzo de hoy 2 de septiembre de 2010:
Aperitivo de tomate con ajo, sal, pimienta negra, perejil y aceite de oliva.
Ensalada de patatas, zanahoria y huevos fritos.
Arroz en blanco.
Carne de cerdo a la plancha con salsa de setas y berenjena.
Elaborado entre fogones por Macarena.




La comida del día 14 de julio de 2010 en Japón.
(Arriba a la izquierda)
El desayuno: Sopa de MISO, arroz en blanco, salmón a la plancha, MISO KON-NYAKU, cacahuetes de MISO, picos de calamares.
(Arriba a la derecha)
El almuerzo: Pan de molde, paté, té rojo, carne de cerdo y repollo con salsa de nabo, TOKOROTEN.
(La segunda a la izquierda)
La merienda: Polo de judías rojas.
(La segunda a la derecha)
La cena: HIYASHIMEN, ensalada de HARUSAME, sopa, zumo de naranja.
(La tercera a la izquierda)
Capuchino.
(La tercera a la derecha)
El postre: Té rojo y mousse de té verde.
(Abajo)
Una lata de cerveza bien fría.

4 comentarios:

  1. jajajajajajajaja ...
    Creo que tu mamá cocina demasiado bien, y con todas esas meriendas hmmm ... Yo también creo que tendré que hacer un poco de ejercicio. ¿Las japonesas crecemos durante las vacaciones? jajajaja
    Saludos Macarena :)

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  2. Crecer está bien, Macarena, pero crecer a lo alto, no a lo ancho. Aunque creo que con nuestra edad ya sólo podemos crecer a lo ancho.

    Respecto a septiembre, es una tradicional época de cambios: se acaban las vacaciones para casi todo el mundo, los nenes vuelven a la escuela a mitad de mes, el buen tiempo se va y el otoño llega, la ropa de verano desaparece de las tiendas... Personalmente no me gusta mucho, es el mes que más se parece a un domingo. Prefiero junio!!

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  3. Hola buenas noches!!

    Casi sin notarlo ya llegó Septiembre. Mes de cambios. Ya se nota que las ciudades vuelven a ser las de antes, puedes hacer todo tipo de trámites, ya hay funcionarios y todo empieza a funcionar. También es la puerta del otoño. Me gusta el otoño y me gusta éste mes, lleno de buen tiempo y colorido. Por cierto, Septiembre es un mes muy bueno para hacer mucho ejercicio, por si se ha crecido en los meses anteriores..... y dejar sitio a los dulces navideños que vendrán después. ¿Hay polos de judías rojas.............. O_O?,

    Gracias por leerme.
    Buenas noches y muy buen fin de semana!!

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  4. Hola, Nora. Es verdad que comí muchísimo en Japón, sin ningún control, ni ejercicio. Además, tuve una lista de comidas que quería comer en Japón. Quería cumplir esa lista a toda costa. Y ahora la consecuencia lógica salta a la vista. Jejeje. ¡Vamos a hacer ejercicio! Saludos.

    Hola, David. Sin excepción, he crecido a lo ancho sin darme cuenta. Comí muchísimo en Japón sin debilitarme con el calor veraniego. El otoño es la época que me gusta. Todavía puedo disfrutar la cerveza bien fría. Jejeje. Saludos.

    Hola, Miguel Ángel. La navidad es la época en la que los españoles crecen mucho. ¿Verdad? Afortunadamente, no se me dan bien los dulces navideños, pero como voy españolizándome poco a poco, por si acaso, tengo que hacer ejercicio antes de la llegada de la navidad. Bueno, el polo de judías rojas está muy rico. ¿No puedes imaginarlo? Saludos.

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