sábado, 30 de abril de 2011

Pensamiento común entre compatriotas

Hace mucho tiempo, escribí una entrada sobre la manera de hacer el huevo frito. Entonces, felizmente, recibí muchos comentarios y al final descubrí la realidad. Supe que la manera como lo hacía mi casera era un estilo fuera de lo corriente y casualmente me parecía lo normal porque era lo que veía habitualmente sólo a mi alrededor.

Aunque hay ligeras diferencias en la cantidad de aceite que usan los españoles, parece que los españoles hacen el huevo frito con más aceite que los japoneses. Es que hace poco leí una entrada de un blog que escribe una compatriota mía que vive en el mismo país que yo. Y decía que ella se siente extraña porque los españoles "fríen" el huevo al pie de la letra cuando hacen el huevo frito. Yo le entiendo perfectamente porque nosotros no "freímos" el huevo cuando hacemos el huevo frito.

Además, encontré un video donde se muestra la manera de hacer el huevo frito. Aunque en este video se usa una sartén para hacer el huevo frito, el método es casi igual que la manera de mi casera que, en vez de una sartén, usaba una olla más profunda donde echaba más aceite. Pero me gustaría saber si esa es la manera típica española de hacer el huevo frito o no. Aunque en el video se usa una sartén, para mí, se usa demasiado aceite.


A pesar de todo, no entiendo bien el español que habla el cocinero. Me parece que suena a otro idioma. ¿De verdad, habla él un español auténtico?

El almuerzo de hoy 30 de abril de 2011:
Dos botellines de cerveza española bien fresquita.
Ensalada china.
Sopa de Wan-Tun y sopa de maíz.
Rollito de primavera.
Arroz frito tres delicias.
Ternera con salsa de ostras.
Pollo con almendras.
Helado de chocolate y fresa.
Disfrutado en un restaurante chino por Macarena.

jueves, 28 de abril de 2011

Japón desde el punto de vista de otros extranjeros

Nunca me había planteado vivir en Francia cuando vivía en Japón. Pero desde que vivo en España, cada día me apetece más mudarme a Francia. No sé por qué, pero es muy curioso el transcurso de esa idea por mi mente.

Tener ganas de vivir en Francia, ya sabéis, es gratis, así que me hago ilusiones de vez en cuando. Vivo en París, estoy pidiendo en una cafetería que da al río Sena: "Un café au lait, s'il vous plaît." Ummmmm, très bien!!

Donc, ah non, entonces, últimamente disfruto de varias ocasiones en las que hablo con franceses. Un día hablé con un francés y me llamó la atención algo que él me dijo. Ese francés dijo que Japón era una sociedad machista. Además, siguió con que España e Italia también eran países machistas. Encima, continuó añadiendo que los países árabes eran totalmente machistas. Y por último, concluyó con que Francia no era machista. Ummm. ¡Qué curioso! Al final me dijó: "Tú te mudaste de un país machista a otro país machista."

En primer lugar, yo no he pensado que mi país sea machista. Históricamente, hubo épocas en las que sólo los hombres obstentaban el poder y épocas en las que era corriente que las mujeres trabajaran en casa. Pero no pensaba que eso fuera un rasgo machista. Pensaba que eran papeles desarrollados en base a las diferencias físicas que hay entre las características de los hombres y las mujeres. Además, por supuesto que ahora es una sociedad igualitaria y libre. Así que yo no sé por qué algunos extranjeros pueden tener esa impresión sobre mi país.

En segundo lugar, según este francés, parece que España e Italia tienen la misma fama de machismo. Eso es muy curioso para mí. Creo que para los franceses España e Italia son similares. Dejando aparte el machismo, yo también pienso que ambos países tienen muchos puntos en común, pero muchos españoles insistirían con obstinación en que no. Pues, sobre el machismo, yo no tengo ni idea. No me da la impresión de que España sea tan machista como él dice. Pero observando a mi alrededor, en realidad, veo que hay hombres orgullosos de imponerse sobre las mujeres.

Por ejemplo, recuerdo la escena en que hay una pareja y la mujer está hablando algo con su marido. Pero el marido interrumpe a su mujer de repente y le grita o le habla en voz muy alta. Parece que no es nada razonable el comportamiento que veo en ese hombre, parece que es por arrogancia y egoísmo. Cuando miro a este tipo de hombres, casi llego a pensar que España todavía es un país machista. Pero bueno, supongo que eso ocurrirá por todo el mundo.

Sin embargo, hay otra razón por la que pienso que España es machista. Desde mi punto de vista, el idioma español me hace pensar que España debía ser machista en su origen. Por ejemplo, creo que la mayoría de los sustantivos que tienen un sentido negativo son expresados en género femenino. Por ejemplo, los siete pecados capitales, la gula, la pereza, la envidia, la avaricia, la soberbia, la lujuria, la ira, y más, la estupidez, la arrogancia, la tacañería, la dictadura, la terquedad, la violencia, etcétera. Cuando me he dado cuenta de eso, he pensado que el idioma español tenía muchas palabras femeninas con un significado negativo. ¿Parece que el idioma español es un tanto machista? ¿No os parece?

En tercer lugar, lo que más me impresionó es que el señor francés afirmó que en Francia no existe el machismo. ¡Qué admirable! Aunque no pienso que Japón sea machista, si alguien me preguntara que no existe el machismo en mi país, yo no podría contestar tajantemente que no. Pero mi interlocutor francés lo afirmó. Eso me hace esperar mucho sobre la vida en Francia. ¿Cuál es vuestra impresión?

De esta manera, cada día me enamoro un poco más de un país vecino.

El almuerzo de 27 de abril de 2011:
Espaguetis con salsa de tomate y atún.
Brécol cocido.
Kiwi al natural.
Elaborado entre fogones por Macarena.

domingo, 17 de abril de 2011

El debilitamiento primaveral

Desde el 11 de marzo, permanecí clavada ante la noticia del seísmo en Japón. Además, para no molestarme, para entender mejor, para saber todo cuanto antes, seguí mirando las noticias de la emisora de televisión japonesa y leyendo los artículos de periódicos en japonés. Me occurió un pequeño incidente sobre ese terremoto, así que no me apetecía hablar activamente sobre ese tema con los extranjeros de mi alrededor. Para controlar mi estado mental y cambiar mi estado de ánimo, de vez en cuando, aproveché para ver los programas de comedia de televisión japonesa a través de internet. O sea, aunque vivo en un país extranjero que no habla japonés, yo tocaba mi idioma materno durante un mes en la mayoría del tiempo de mi vida cotidiana. Por consiguiente, ahora el debilitamiento de mi español es bien evidente.

Cada vez que redacto algo en español, siento que aumento el número de veces que consulto mi querido diccionario electrónico. No es sólo por buscar las palabras que no me salen, sino que también tengo muchas dudas sobre el uso de la preposición española. Por ejemplo, me surge la duda de si es "aficionada a" o "aficionada de", etcétera. Ah, quiero ignorarlo todo.

Ha empeorado incluso mi español escrito, así que el debilitamiento del español oral es insondable. Como ni siquiera chapurreo español como antes, poco a poco siento pereza para hablarlo, y al final, llego a estar muy silenciosa. Otra vez caigo en un círculo vicioso. ¡Ah, por Dios!

Tenía ganas de pasar esta Semana Santa muy activa y muy divertida. Pero el desastre de la naturaleza me quitó las ganas totalmente. Así que empiezo la Semana Santa sin planear nada. Pero bueno, es lo mismo como siempre. Todos los años la empiezo sin tener ningún plan especial. JAJAJAJAJA.

No estaría mal pasarla tranquiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiilamente olvidando el español.

Por cierto, mi Rafa ha ganado el torneo de fútbol en Montecarlo, ah, no, de tenis. ¡¡¡Enhorabuena!!! Ha vuelto a triunfar después de la victoria en Tokio. Estoy muy emocionada. En realidad, no pude animarle en el torneo de Miami por la preocupación del seísmo. "Por eso", mi Rafa no pudo ganar contra Djokovic. "Está muy claro que fue por mi culpa." Lo siento mucho, Rafa. Pero hoy yo he vuelto a animarte pasando la mopa, "por eso", tú pudiste ganarle esta final a David Ferrer y me alegro mucho. Tu imagen hincándole el diente a la copa ha sido muy atractiva. Ayyyy, querría que me mordieras a mí también...

El almuerzo de hoy 17 de abril de 2011:
Arroz al curry con carne picada de ternera, tomate triturado, cebolla, calabacín, zanahoria y berenjena.
Merluza a la plancha con zanahoria y pimiento verde.
Manzana al natural.
Elaborado entre fogones por Macarena.

El almuerzo de 16 de abril de 2011:
Arroz en blanco.
Ensalada de lechuga, zanahoria y pasas.
Salmón a la plancha con champiñones y calabaza.
Gazpacho.
Elaborado entre fogones por Macarena.

El almuerzo de 15 de abril de 2011:
Arroz en blanco.
Verduras salteadas de repollo, champiñones, zanahoria, puerro, beicon y jamón cocido.
Tomate con atún, pasas y mayonesa.
Elaborado entre fogones por Macarena.

El almuerzo de 14 de abril de 2011:
Arroz en blanco.
Rollitos de carne de ternera con queso.
Verduras cocidas: brécol, coliflor y judías verdes.
Yogurt al natural.
Elaborado entre fogones por Macarena.

martes, 12 de abril de 2011

Falta respeto

Entre nosotros, la verdad es que yo vivo en un país que está bien lejos de mi tierra natal. Creo que algunos de vosotros ya os habéis dado cuenta de que yo aprecio mucho el país donde habito. Bueno, para la gente que lo oye por primera vez, voy a exponer algunos ejemplos. Bueno, no es que sólo haya una única cosa que yo aprecie, sino que tengo muchos aspectos que valoro de donde vivo, así que puedo citaros tan sólo una pequeña muestra, lo siento mucho. Por ejemplo, en el país que vivo lo magnífico es que la cerveza está muy buena, lo maravilloso es que la cerveza es muy barata, además, lo prodigioso es que puedo empezar a beber cerveza bien fría desde las doce en punto del mediodía, públicamente y sin evitar las miradas ajenas. Ya veis. ¡Qué envidia para vosotros! ¿Verdad? Bueno, voy a dejarlo así, es que no está bien visto pavonearse. Y tampoco voy a atreverme a publicar el nombre del país. Jejeje.

En tal país donde yo vivo orgullosamente, sin embargo, hace unos días yo caí en un abismo. Ese país que yo aprecio mucho me desilusionó. Voy a atraverme a quejarme públicamente, hoy, en este momento, en mi blog.

Yo sigo apuntada desde hace tres años a unas clases. Hace unos días, como siempre, fui a recibir mi clase. Para llegar allí, atravieso por dentro de un centro deportivo que uso como atajo. Aquel día me encontré allí con una imagen súper espantosa. En el centro deportivo hay muchas pistas de fútbol, de baloncesto, de tenis, etcétera. Cuando paso por allí, puedo verlas. Pero la última vez, cuando estaba atravesándolo como siempre, me fijé en que las circunstancias no fueron claramente las habituales. De repente, no daba crédito a mis ojos, pero lo que mis ojos captaron era la realidad. Aunque había mucha gente que practicaba deportes, cada cancha estaba llena de basura. Para ser exacta, era la basura que se desechaba dentro de cada cancha después de comer algo, o sea, gente local de este país jugaba en las canchas llenas de basura como si tal cosa. Me quedé sin palabras.

En primer lugar, me sorprendí mucho porque parecía que había gente que tiraba basura en la cancha deportiva. Se dejaban un montón de vasos de plástico, paquetes de hamburguesas, pañuelos de papel, incluso unas rodajas de chorizo. Imaginaba que la gente que las tiraba en la cancha sería aficionada a los deportes o serían sus familiares que iban a verles jugar. Es que es difícil de imaginar que una persona ajena entre en la cancha para comer algo donde juega otro que ha pagado por alquilar la pista. Tengo muchas dudas de por qué pueden tirar basura en las canchas que ellos mismos usan siempre para hacer deporte. No puedo entender el mecanismo de su pensamiento. ¿Puede decirse que es un aficionado a ese deporte, aunque no respete la cancha donde juega?

En segundo lugar, me asombré mucho porque, aunque el suelo estaba lleno de basura, toda la gente disfrutaba su deporte como si no tuviera ninguna molestia. Nadie intentaba recoger la basura. Nadie atendía la basura. Es más nadie se quejaba de la situación. ¿No les fastidiaría esa situación? ¿Pensarían que la limpieza no era parte de su obligación?

La verdad es que el país donde yo vivo es muy fuerte en el mundo del deporte. Eso también me enorgullece. Pero el nivel deportivo no se corresponde con el nivel cívico. Eso me decepcionó totalmente.

sábado, 9 de abril de 2011

Un desastre de la naturaleza en nuestro país (4)

Terminó un mes de marzo que me pareció muy largo, y cada día he intentado animarme para devolver la normalidad a mi mente. Pero la fuerza de la naturaleza volvió a atacarnos hace dos días, para ser exacta, volvió a atacar mi tierra. ¿A quién puedo pedírselo? "¡Por favor, basta ya!"

Aunque es una ironía, después de haber ocurrido ese desastre de la naturaleza, llego a comunicarme con mi familia y mis amigos de Japón con más frecuencia que antes. Aunque no puedo ayudarles en algo concreto que ellos necesiten directamente e inmediatamente, no puedo parar de preguntarles: "¿Qué tal estáis? ¿Estáis bien? ¿Cómo va todo? ¡Gambatte!"

Una amiga mía que vive en una prefectura limítrofe justo al sur de FUKUSHIMA, no recibió el abastecimiento de agua corriente hasta 13 días después del seísmo. Le envié un correo tras una semana del terremoto para preguntarle por su situación.

Es que frecuentemente salen las noticias de televisión sobre las zonas centrales afectadas por la catástrofe, pero las otras zonas que también recibieron daños y que están fuera del centro de la catástrofe no salen en las noticias. Por consecuencia, a veces, allí no llega el socorro inmediatamente, aunque también lo necesiten.

Entonces, quería comprobar su situación actual y si pudiera ayudarle en algo, quería hacerlo. Pero ella me dijo que podía conseguir los comestibles en los supermercados, aunque fuera en muy poca cantidad, y que se restableció la electricidad y el gas. También me dijo que, aunque todavía no había suministro de agua corriente, los vecinos le daban agua de pozo y que con eso iba tirando para el uso más necesario excepto para bañarse.

Después de entender su situación, no podía decirle nada más que "Gambatte." Pero cuando le envié un correo electrónico una semana más tarde, ella me contestó que ya tenía el agua y que se sentía muy agradecida. Pero la vida sin agua durante más o menos dos semanas debió ser dura. Aún así, no sé por qué, pero al final me dijo: "¡Gracias! Gracias por animarnos." Pero yo, realmente, yo no hice nada...

El caso de mi prima es un poco distinto. Ella vive con su marido en Tokio y los dos trabajan. Salen de casa hacia las seis y media de la mañana y vuelven por la noche hacia las ocho o más tarde. Y por la influencia del terremoto, los supermercados cierran muy temprano para ahorrar electricidad. O sea, ellos no pueden hacer la compra los días normales. Encima, la única ocasión en que pueden hacer la compra es durante el fin de semana, no es nada seguro que se venda todo lo que necesitan. Pero hay maneras alternativas, por ejemplo, ir al comedor o comprar la comida rápida, así que ella dice que no está bien quejarse de eso, pero se queda un poco cansada por no saber cuándo terminará tal situación. Y en tal caso, lo único que yo puedo hacer es decirle: "Gambatte." Sí, ahora me siento una persona súper impotente.

Yo no soy una víctima directa de ese desastre. Esa realidad es afortunada desde un punto de vista. Pero yo quería estar en mi tierra en ese momento del horrible desastre. Aunque no debo decir eso a la ligera, me gustaría haber estado presente en ese momento. Aunque ahora vivo en un país lejos de mi país, he recibido muchas palabras de ánimo, consuelo y preocupación después del terremoto en mi tierra por parte de la gente de mi alrededor. Lo agradezco mucho, de verdad. Pero a veces, siento una gran distancia entre los sentimientos de ellos y los míos. Probablemente, sea porque yo soy demasiado sensible o porque el suceso es de un país muy lejano. Pero, aunque lo entiendo lógicamente en mi cabeza, siempre me siento herida en mi corazón. Si hubiera estado en mi tierra... No puedo dejar de pensarlo.

Por otro lado, también siento alguna distancia entre mis compatriotas y yo. Afortunadamente, a mi familia y a mis amigos no les afectó tan gravemente como a otros, pero ellos fueron afectados directamente, no son como yo. Por mucho que me preocupe por ellos, por mucho que les anime, me atormenta que no soy más que una persona ajena. Por mucho que yo también sea japonesa, por mucho que sienta el golpe y una tristeza, en realidad tengo dudas de si podría compartir algo en común con mis compatriotas que viven allí. ¿Si hubiera estado con ellos en mi tierra, habría sentido más complicidad con ellos? ¿Así no sentiría tanta soledad fuera de mi país? Para colmo, cuando pienso  en estas cosas me hace sentirme más abatida, y me pregunto si adopto una postura hipócrita.

¿A quién puedo pedírselo sinceramente? "Por favor, que paren ya los terremotos. Ya es suficiente."