jueves, 25 de noviembre de 2010

Los efectos secundarios

Mi Rafa es el hombre más fuerte del mundo. Actualmente, él sigue ganando sus partidos en Londres. Es una noticia muy placentera. Todo es gracias a su apoyo familiar, a su fuerza mental, a su fuerza física, a su esfuerzo y a su sacrificio.

Ayer, naturalmente, estuve viendo en el televisor su partido contra Djokovic. Fue una lástima que Djokovic tuviera molestias en uno de sus ojos, no es que me diera igual, pero lo importante es que mi Rafa ganó. Lo siento mucho por Djokovic. La próxima vez, seguro que él elegirá mejor sus lentillas.

Ayer, mi Rafa también contaba con el apoyo de su tío Toni que, además, compartía asiento en la grada con un invitado argentino sobradamente conocido que es toda una estrella mundial del fútbol y un caso menos afortunado fuerta del terreno de juego. Me refiero a Diego Armando Maradona.

El tenis es uno de los deportes más destacados, pero es muy diferente del fútbol, que sigue siendo el deporte favorito de la mayoría de los españoles, les encanta. Lo que quiero decir es que durante el partido de tenis, no encuentro un momento en el que pueda relajarme y disfrutar del partido sin tensión.

Voy a comparar el tenis con el fútbol. Para mí, que no soy tan aficionada al fútbol, mirando un partido del fútbol, me siento muy excitada y tensa sólo cuando los jugadores compiten dentro del área de gol. Además, durante los noventa minutos, no siempre compiten en ese área. Hay bastante tiempo en el que puedo relajarme tomando una cerveza bien fría y picando algo que esté sabroso. Para mí, que no soy tan aficionada del fútbol, por decirlo así, hay mucho tiempo irrelevante. No os enfadéis, es que a mí no me interesa el fútbol.

Por otro lado, el partido de tenis siempre me pone tensa. En el tenis, una vez que el jugador saca la pelota, ya cada punto significa un montón y es súper importante. No sé cómo puedo explicarlo mejor, de todos modos, el partido continúa en una lucha en total tensión entre sólo dos contrincantes.

Es una situación que me hace sentir súper nerviosa. Los sentimientos se exteriorizan ya sea de forma alegre o triste, por cada punto jugado. Naturalmente, no puedo relajarme ni un momento, sobre todo, durante los partidos de mi Rafa.

Si os explico cuán inquieta estoy, yo no puedo sentarme en el sofá, ni tomarme tranquila mi querida cerveza. En cambio, mi estado de ánimo se vuelve tan alterado que incluso me pongo a limpiar el suelo con la mopa, además, si el partido dura mucho, incluso empiezo a planchar las blusas.

Es que no me siento tranquila, estoy súper inquieta durante todo el partido de mi Rafa. Entonces, siempre que llega el momento de comienzo del partido, cojo la mopa y empiezo a limpiar el suelo moviendo la mopa afanosamente, por supuesto que no olvido ver el partido y animarle en voz alta.

Entonces, después del partido de mi Rafa, el suelo de mi habitación está más que limpio. A veces, incluso las blusas están desarrugadas y planchadas impecablemente. Ver los partidos de tenis de mi Rafa produce en mí, de forma imprevista, unos efectos secundarios imprevisibles.

El almuerzo de hoy 25 de noviembre de 2010:
Arroz en blanco.
Hamburguesa casera a la salsa de tomate con guarnición de guisantes, pepino y alcachofas.
Caqui y kiwi al natural.
Elaborado entre fogones por Macarena.

5 comentarios:

  1. Cuando vimos a Rafa Nadal y a Maradona en la tele, mi novia dijo: no puede haber dos deportistas más diferentes. Y era totalmente cierto, dos genios del deporte, pero con dos caracteres muy distintos.

    Lo mejor es que al final del partido le preguntaron a Nadal por el aplastante resultado del segundo set, y Rafa dijo que Djokovic tuvo muchas molestias en el ojo y que no pudo competir bien, por lo que ese set no era significativo. También dijo que el verdadero nivel entre los dos es el del primer set, donde le costó muchísimo ganarle. Todo sencillez.

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  2. Y entre los efectos secundarios, no se te ha dado por cocinar? Jajajaj Lo que es a mí, tal vez cuando no tenga la obligación de hacerlo, me gustará la cocina...
    Saluditos desde Buenos Aires! =)

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  3. Hola buenas tardes!!

    Leyendo ésta entrada se me ha ocurrido una idea. A ver que les parece a ustedes. Tengo que conseguir que Macarena me visite un día que "Su Rafa" tenga un partido de tenis, de estos largos con cinco sets, y muchos tie-break. La televisión estaría colocada estratégicamente en el salón, donde por casualidad habría una mopa cerca. La televisión tendría ruedas, y según el partido se fuera alargando la iría trasladando por las demás habitaciones. Para rematar, si el partido es muuuuuuuuy largo, la llevaría a la cocina, es que allí tengo la plancha, jejeje. Pensándolo bien, no es mala idea. Pero que no se entere Macarena, por favor.
    A ver que escusa pongo para que me visite.......

    Gracias por leerme.
    Buenas tardes!!

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  4. ¡Buenas!

    Tienes razón en lo de que en el fútbol hay mucho tiempo irrelevante. Para que te guste un partido tienes que apoyar a uno de los 2 equipos que están jugando. Si quieres que gane uno de los 2 hasta los momentos intrascendentes resultan entretenidos. ¡Si no fuese hincha del Athletic creo que sería incapaz de soportar la mitad de los partidos que juega!

    El problema que yo le veo al tenis es que hay mucha preparación en comparación con el tiempo de juego real: Se colocan los jugadores. Se bota la pelota. Se saca. Da en la red. Falta, a volver a sacar. Los jugadores se recolocan. Se vuelve a botar la pelota, se saca. Ace. Se vuelven a colocar los jugadores... De todas maneras cuando los dos jugadores tienen un nivel parecido he de reconocer que los tantos son apasionantes. Pero soy incapaz de ver un partido entero sin cambiar de canal. Supongo que al final todo son gustos.

    ¡Un abrazo!

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  5. Hola, David. Yo no conozco mucho a Maradona, pero desgraciadamente lo que escucho es negativo. En cambio, mi Rafa es muy, pero muy humilde. Yo también escuché su entrevista después del partido. Siempre sus comentarios son considerados con el rival. Le respeto mucho. Saludos.

    Hola, cyberfelina. No se me ocurre ni por un momento preparar la comida durante su partido. Jajajajajaja. Odio cocinar obligatoriamente. Pero mi hambre me obliga a cocinar. ¡Qué triste! Saludos.

    Hola, Miguel Ángel. ¿No te molesta si grito con una mezcla de español y japonés? Si un partido es muy largo por un tie-break, me volveré loca. O sea, pasaré la mopa por cualquier sitio. Sería mejor estar en una casa grande. Jajajajajaja. Saludos.

    Hola, The Loser. Si yo fuera hincha de algún equipo de la liga española, podría disfrutar el partido. Pero me temo que ahora no tengo ningún equipo favorito. Si jugara algún fútbolista japonés en la liga española, quizás disfrutaría con una cerveza bien fría como pasaba con los partidos del pasado mundial. Cuando yo veo los partidos de mi Rafa, no tengo ni un momento que me aburra. Quiero ver su aspecto reposando sentado en el banco, esa serie de gestos que hace antes de sacar y cada grito que da justo cuando golpea la pelota. Es un tiempo de disfrute. Jajajajajaja. Saludos.

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