martes, 16 de noviembre de 2010

Una persona extranjera y una lengua extranjera

Creo que no hay una regla para que sólo los españoles puedan utilizar la lengua española. Aunque soy extranjera y, además, de un país donde la gente habla japonés, sigo aprendiendo español y ahora por fin puedo chapurrearlo.

Cuando iba a una academia de español, hace cuatro años, aprendí varias expresiones que significaban "mucho". Por ejemplo, "un montón de", "un gran número de", "un mar de", etcétera. Recuerdo que me causó una impresión de admiración bastante fuerte. Como aprendí varias expresiones, la única función importante era practicarlas y usarlas para no olvidarlas. Así que empecé a utilizar estas expresiones cuando surgía la ocasión.

Una de las expresiones que más me impresionó fue "una leche de". Como aprendí que su significado era igual que "mucho", utilizaba esta expresión siempre que tenía la oportunidad. Por ejempo, "Ayer fui al centro. Y había una leche de gente."

Sin embargo, cada vez que utilizaba en clase la expresión "una leche de", el profesor nativo se echaba a reír porque no podía evitarlo, aunque intentara controlar la risa. ¿Qué le pasaba? No se reía cuando yo utilizaba otras expresiones. Pero cuando yo usaba "una leche de", era cien por cien seguro que se partía de risa. Yo me extrañaba mucho. ¿Es que mi español no era correcto? ¿O mi pronunciación era mejorable?

Aunque le pregunté a mis compañeras extranjeras si yo decía algo raro, ellas tampoco podían entender por qué había tanta risa. Así que un día, le pregunté a un conocido español que por qué mi profesor se reía cuando yo decía: "Tengo una leche de hambre".

Entonces, aunque no me lo podía creer, él también se puso a reír como hacía mi profesor. ¿¿¿??? Él me explicó que sonaba divertido, sobre todo, para una extranjera como yo.

Aunque no entendía nada de nada, le pregunté otra cosa. ¿Qué tal sería si usara en su lugar la expresión "un mar de"? Él dijo que sonaba normal y ya no era tan divertido como usar "una leche de".

En conclusión, parece que hay alguna expresión que hace reír mucho a los españoles cuando las usa una extranjera. Tengo una leche de curiosidad por resolver este misterio.

El almuerzo de hoy 16 de noviembre de 2010:
Arroz con setas.
Carne de cerdo a la salsa de jengibre y brécol.
Tortilla de patatas, tomate al natural y judías verdes cocidas.
Plátano con canela.
Elaborado entre fogones por Macarena.

6 comentarios:

  1. Mi opinión sobre el divertido misterio:

    Nunca he escuchado la expresión "una leche de" como sinónimo de "mucho". Pero nunca, nunca. Lo más normal es "un montón de" y, si estás en Andalucía y eres muy flamenca, puedes decir "una jartá de".

    "Un mar de" también es correcto (lo más correcto sería "la mar de"), pero se usa mucho menos hoy día (nuestros abuelos lo usan más).

    Pero ya te digo, creo que "una leche de" no es correcto (al menos nunca la he escuchado), así que si alguien me la dijera también me reiría, o pondría cara de extrañado.

    A ver si alguna vez quedamos y me cuentas todas tus dudas sobre el español. Prometo responderte despacio (jeje).

    Un montón de saludos.

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  2. Hola buenas tardes!!

    Bueno voy a empeorar un poco tu dilema, pero para eso estamos aquí, ¿verdad?.La expresión a la que te refieres, con ese significado, la tengo oída alguna vez, cuando era muy, muy ,muy niño, (que conste que ahora soy un chavalín eeh). Ahora expresiones habituales que oigo con esa palabra son:

    - Eres la leche. Expresión que indica algo o alguien que causa molestia, enfado o disgusto.
    - Echando leches. A la mayor rapidez
    - Mala leche. Mal genio, mala intención (espero que nunca tengas mala leche, eeh)

    Para indicar una especie de cantidad o magnitud de algo, la tengo oída de la forma siguiente:

    - Hacer un frío/calor de la leche. Para indicar que hace mucho. Con gente nunca la usaría y sí me resulta extraño oírlo con ese significado.

    Gracias por leerme.
    Buenas tardes!!

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  3. ¡Hola!

    Estoy de acuerdo con la explicación que magistralmente ha dado Miguel Angel. Pero añadiría (siempre desde el valor que da la ignorancia, así que no te lo creas porque puede ser incorrecto) que la expresión "la leche" es una palabra que se usa en los casos que ha dicho Miguel Angel para sustituir a una palabra mal sonante. O sea, que no es una palabrota pero la sustituye.

    A mi personalmente oir a un extranjero decir alguna palabrota siempre me ha hecho gracia, pero no sabría explicar por qué. Quizás porque no me espero eso. Es cómo cuando escucho a mi madre usar expresiones como "guay" o "mola": no me pega y me hace gracia. Quizá sea esto por lo que se ríen al oírte decir "la leche".

    ¡Un abrazo!

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  4. Hola, David. Gracias por enseñarme en detalle. ¿Pero “jartá” tiene algún significado propio? Es que no sale esta palabra en mi diccionario. Últimamente, yo uso casi siempre “un montón de” y parece que funciona mejor que las otras expresiones. Así que probablemente nadie pueda reírse de mi forma de hablar. Pero entonces, me pregunto si mi profesor nos enseñaba algo raro. Saludos.

    Hola, Miguel Ángel. Gracias por enseñarme cuidadosamente. Al final, he entendido que la leche tiene un matiz algo negativo. También escucho mucho “me cago en la leche”. Aunque me parece muy poco higiénico, creo que es muy coloquial usar esta expresión que yo aprendí. Saludos.

    Hola, The Loser. Gracias por enseñarme con amabilidad. Parece que la palabra “leche” puede provocar risas cuando no se utiliza bien. Según me han explicado, la palabra leche es muy usada en la jerga que utilizan los adolescentes españoles. Así que como tú dices, hay gente a la que no le sienta bien, puede que sean alérgicos a la lactosa. Jajajajaja. Ahora lo entiendo mejor. Saludos.

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  5. Hola, Macarena. "Jartá" no la vas a encontrar en el diccionario porque es la pronunciación deformada de "hartada" (http://buscon.rae.es/draeI/SrvltConsulta?TIPO_BUS=3&LEMA=hartada), es decir, una gran cantidad de algo, tanto como para hartarse.

    Ahora bien, nunca digas "hartada", nadie lo usa y sonaría raríiiisimo. "Jartá", sin embargo sí se usa coloquialmente en Andalucía.

    Es curioso que hay palabrás cuya pronunciación errónea es muy habitual pero cuya pronunciación correcta no se escucha nada. Pasa lo mismo con "malaje", que es la deformación de "mal ángel", es decir, "mal carácter, antipático".

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  6. Hola, David. Gracias por tu detallada explicación. Las palabras van evolucionando y cambiando de forma natural. Así que quizás algún día “jartá” se pueda encontrar en el futuro en un diccionario. A propósito, la palabra “malaje” la he podido encontrar en mi diccionario. Saludos.

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