Siguiendo la costumbre japonesa

Parece que los japoneses que viven en países extranjeros occidentales coinciden en que el país que les acoge celebra el año nuevo de una forma que no tiene nada que ver con el año nuevo en Japón. Tal como nosotros sentimos que la Navidad occidental es original, pienso que nuestro año nuevo es único y muy peculiar.

Reconozco que se me agotaron las fuerzas al preparar la comida especial para Navidad, así que no tengo ganas de preparar una comida especial para año nuevo. Si estuviera en Japón, me satisfaría comer la comida especial de año nuevo.

En Japón, los tres primeros días del año se llaman "SANGANICHI". Y mucha gente empieza a trabajar desde el día cuatro de enero, aunque casi todas las tiendas siguen abiertas. En la época de las abuelas, se decía que no se debía hacer ni las tareas de casa durante estos tres días. Creo que era una costumbre que se transmitía de forma oral de generación en generación y que se consolidó como una tradición bien arraigada. Pero en realidad, ahora la gente no respeta ese tipo de costumbres por el nuevo estilo de vida que hay en estos tiempos modernos.

Este año tengo ganas de pasar estos tres días siguiendo la antigua costumbre japonesa, aunque necesito preparar la comida y también he puesto varias veces a trabajar la lavadora. Es muy fácil malgastar mi tiempo sin querer, por otro lado, no he tenido el tiempo suficiente para pasarlo tranquilamente con consciencia. Al menos estos tres días, voy a alejarme positivamente de las tareas de casa.

Bueno, voy a tomarme una cerveza bien fría.

El almuerzo de hoy 2 de enero de 2011:

Espaguetis con salsa casera de tomate y nata, béicon y calabacín.

Ensalada de lechuga, apio, zanahoria y pepino.

Elaborado entre fogones por Macarena.