Eso es lo que ella escribe sobre los personajes de cierto país donde ella vive.
Se dice que ellos son decididos, pero personalmente parece que no escuchan nada de las opiniones de otra persona.
Se dice que ellos son positivos, pero personalmente parece que interpretan todo según su conveniencia.
Se dice que ellos están plenamente seguros de sí mismos, pero personalmente parece que son arrogantes y no reconocen sus errores.
Se dice que ellos son teóricos, pero personalmente parece que sólo vienen con excusas convenientes.
Se dice que ellos son francos, pero personalmente parece que no tienen pelos en la lengua.
Se dice que ellos viven a su ritmo, pero personalmente parece que no son considerados con los demás.
Me hacía reír mucho, además, sentía simpatía, aunque no sé por qué.
Dependiendo del punto de vista, todos se caen al lado bueno y al lado malo.
Sería muy feliz de ver sólo el lado bueno de las cosas.
Ah, no os preocupeis, ella no habla de vuestro país.
Chocolate con churros.
Disfrutado en un bar por Macarena.
jajajajajaja ...
ResponderEliminarMacarena, qué susto ... pensé que era el mío jajajajaja
Me gustaría leer ese blog :)
Un abrazo con todo cariño.
Vivir en un país ajeno es muy difícil, no tiene nada que ver con visitarlo por vacaciones. Supongo que esta chica debe estar un poco harta del carácter de sus nuevos vecinos, jeje, pero seguro que todos tendríamos quejas similares en un país que no es el nuestro, sea cual sea este país, porque en todos sitios hay cosas buenas y malas, y siempre tendemos a fijarnos en las malas.
ResponderEliminarAl final siempre vamos a encontrar diferencias con nuestra propia cultura, y como no podemos cambiar a toda una sociedad según nuestro gusto, lo mejor será centrarnos en lo positivo e intentar que lo negativo nos afecte lo mínimo ¿no?
Hola, Nora. Siento mucho haberte dado un susto. Jajajajajaja. Pienso que, sea la nacionalidad que sea, la gran mayoría de los extranjeros occidentales nos causa una impresión más o menos parecida. Es que creo que lo contrario a lo descrito en aquel blog se corresponde más con las características de nosotros los japoneses. Parece que en las sociedades occidentales se fomenta menos el espíritu de grupo y más el espíritu individual. Aunque también depende de si la persona ve antes la parte positiva o la parte negativa. Saludos.
ResponderEliminarHola, David. Estoy totalmente de acuerdo contigo. Es mucho mejor ver lo positivo que lo negativo, aunque he experimentado que era muy difícil para mí. Pero comparándome con la Macarena de hace cuatro años, ahora hay muchas menos cosas que me enfaden. Sí, la verdad es que todavía quedan algunas. Jajajajaja. Saludos.
Me ha gustado tu comentario: "Parece que en las sociedades occidentales se fomenta menos el espíritu de grupo y más el espíritu individual". Sin haber estado nunca en Japón, desde la distancia tengo esa misma impresión: la cultura japonesa da más importancia a la colectividad que al triunfo personal, y eso es algo muy positivo siempre que esté bien enfocado.
ResponderEliminarHola, David. Gracias por disfrutar de mi opinión. Cuando volví a Japón este verano, hablé de este tema con mi hermana. Concluímos en que no estaría mal la educación japonesa, pero también se necesitaba la educación occidental, aunque desgraciadamente, probablemente, las dos no serían conciliables. En ese punto, es muy valioso conocer los países extranjeros. Saludos.
ResponderEliminar¡Buenas!
ResponderEliminarDebe ser complicado adaptarse a una cultura distinta y acostumbrarse a que a la gente le parezca normal lo que a uno le extraña o le molesta. Como David yo también tengo esa misma impresión de que las sociedades occidentales fomentan más el individualismo que el espiritu de grupo. Pero como todo, esto tiene su parte negativa y positiva. Habría que crear una mezcla de educación japonesa y educación occidental. Aunque pienses que probablemente no sean conciliables conocer otros puntos de vista nos permite ponernos en el lugar de los demás y entenderlos un poco mejor.
¡Un abrazo!
Hola, The Loser. Creo que la única manera es conocer otras culturas y a otra gente que tenga costumbres diferentes, además, es importante que lo experimentemos personalmente. Todavía siento que soy muy japonesa cuando no puedo decir mi opinión definitivamente. Saludos.
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